Taxis en Pekín
Aunque a ciertas horas y en determinados lugares resulta casi imposible encontrar uno libre, por Pekín circulan más de 70.000 taxis las 24 horas del día.
Los taxis de Pekín son una forma rápida y económica de llegar a cualquier lugar, siendo posible recorrer la ciudad por muy poco dinero. Como punto negativo, los taxistas conducen de forma alocada y los coches no suelen tener cinturones de seguridad.
Tarifas
El precio de los taxis en Pekín es realmente económico, aunque al ser grandes distancias el importe total puede ascender a más de lo que se espera. Aquí podéis ver las tarifas:
- Primeros 3 kilómetros: 14 ¥ (2 US$)
- Coste por kilómetro adicional: 2,30 ¥ (0,30 US$).
- Cada 5 minutos de espera (circulación a menos de 12 km/h): 2 ¥ (0,30 US$)
- A partir de 15 kilómetros de trayecto: el precio por kilómetro aumenta un 50%.
- Suplemento entre 23:00 y 5:00 horas: el precio por kilómetro aumenta un 20%.
Ejemplos
- Desde el aeropuerto hasta el centro de la ciudad (Tian'anmen): en torno a 120 ¥ (17 US$)
- Desde el centro hasta la Villa Olímpica: entre 60 ¥ (8,50 US$) y 70 ¥ (9,90 US$)
- Desde el centro hasta el Palacio de Verano: entre 70 ¥ (9,90 US$) y 80 ¥ (11,40 US$)
Taxistas ilegales y picaresca china
A pesar de que en Pekín los taxistas son bastante honrados (suelen ir por la ruta más corta y casi siempre dan el ticket), siempre hay alguno que se escapa de esta senda. En las zonas más turísticas es posible que encontréis taxis parados que cuando les dices tu destino te piden un precio fijo mucho mayor del que costaría el trayecto cuando los taxis oficiales funcionan siempre con taxímetro. Evidentemente recomendamos evitar a estos taxistas.
Respecto a los taxis ilegales, en Pekín no abundan (aunque las cifras hablan de miles). El lugar más frecuente donde suelen estar es en el aeropuerto. Para evitarlos tan sólo tenéis que ir a la cola normal de los taxis y tomar uno allí. Están pintados y señalados correctamente.
Consejos imprescindibles
Dado que el 95% de los taxistas no saben inglés, para llegar a cualquier destino lo mejor es llevar un mapa y señalárselo. Si donde queréis ir está cerca de una estación de metro, suele ser mejor pedir que te lleven a esa estación y luego caminar.
También es vital coger una tarjeta de visita del hotel nada más llegar. En ellas está indicada la dirección en chino y el número de teléfono.
Cuando llueve los taxis "desaparecen" y es misión imposible encontrar uno libre, si tenéis que ir al aeropuerto u otro lugar importante, planificadlo con antelación.